Fue hace ya unos meses cuando desde la casa real decidieron tomar una decisión drástica con Froilán, el hijo de la infanta Elena y Jaime de Marichalar. Y es que no es que sea precisamente ningún secreto que el que sigue siendo el nieto favorito del rey Emérito Juan Carlos I no se ha caracterizado nunca por ser precisamente una persona de perfil bajo, sino más bien lo contrario, se ha convertido en uno de los miembros de la familia real que más se ha visto involucrado en diferentes tipos de polémicas.
No han sido pocas las veces que han aparecido noticias en los medios que no dejaban en muy buen lugar al hijo de la infanta Elena, algo que desde la Zarzuela siempre han visto, evidentemente, como algo muy negativo para la imagen de la institución.
Es por eso que, viendo lo efectiva que había sido la estrategia de enviar a Juan Carlos I a Abu Dabi y así alejarlo también de los focos y de la polémica en España, sus padres siguieron la recomendación de los actuales reyes de envíar a Froilán también a Abu Dabi.
La vida de Froilán en Abu Dabi no es como la de su abuelo
En este sentido, han sido varias las noticias que han aparecido en los medios en los últimos tiempos que hablaban de un Froilán que vivía en Abu Dabi rodeado de lujos, y un apartamento muy lujoso y que formaba parte además de la plantilla de trabajadores de una de las petroleras más importantes del país.
Sin embargo, como han apuntado en varios medios algunas fuentes cercanas al sobrino del rey Felipe VI, parece ser que el hijo de la infanta Elena no tiene precisamente un trabajo muy destacado, y que de hecho el no trabaja ni en una petrolera, por lo que el famoso sueldo de seis cifras del que tanto se habló no era más que humo.
Evidentemente no es que Froilán esté sufriendo por llegar a final de mes en Abu Dabi, pero no son pocos los que argumentan que el papel del ejecutivo de una gran empresa que se vendió en algunos medios no es que sea precisamente la realidad del hermano de Victoria Federica.