El tema de la presunta crisis matrimonial entre Felipe y Letizia ha sido una constante desde hace un tiempo atrás, pero precisamente en los últimos años, estos rumores han cobrado fuerza.
Este año estos rumores han alcanzado su punto álgido. Sin embargo, pese a todas las especulaciones, la pareja se mantiene unida y recientemente celebró sus 20 años juntos y en el 2024 serán sus dos décadas de casados.
Lo cierto es que desde que Felipe está con Letizia parece estar centrado en su matrimonio, tanto, que sus amistades lo critican porque dicen que su mujer lo tiene “tomado por la correa”, pero esto siempre no fue así.
En su juventud el actual rey de España, aunque no obtuvo la fama de mujeriego de su padre Juan Carlos I, sí tuvo varias parejas, algo que no es de extrañar, pues el soberano se caracteriza por su indudable atractivo físico. Algunos nombres conocidos fueron Victoria Carvajal, Isabel Sartorius y Eva Sannum y, por supuesto, Letizia.
Agitada vida amorosa de Felipe VI
Aunque siempre se ha caracterizado por tener una relación sólida, hubo un momento en el que el monarca quiso experimentar algo diferente porque atravesaba por un duelo amoroso.
Y es que, en su momento el entonces príncipe de Asturias estaba muy enamorado de Eva Sannum. Sin embargo, la mujer vio que él no estaba dispuesto a renunciar a nada por ella. Así que presuntamente por este motivo y la constante presión mediática decidió romper la relación. El hijo de Juan Carlos I quedó devastado, ya que no estaba acostumbrado a que le dejasen. Así que buscó relaciones esporádicas para cubrir ese vacío.
Para aquella época según lo relatado por la experta en la corona española, Pilar Eyre desde su blog en Lecturas, Felipe VI realizaba fiestas con importantes modelos del país. En algunas en solitario y otras con un grupo de amigos y se lo pasaba en grande.
Supuestamente, para que sus padres no se enterasen de nada se las llevaba a una conocida finca donde pasaba tiempo con su gran amor, Eva Sannum. Se trata de una finca que se encuentra a 70 kilómetros de Madrid, en el pantano de San Juan.
Refugio de Felipe en su juventud
Este lugar es muy popular en los veranos para los madrileños, quienes se trasladan ahí con el propósito de disfrutar de una jornada de playa. Ahí se refrescan de las altas temperaturas y disfrutan de deportes acuáticos en esta enorme extensión de agua dulce de 650 hectáreas de superficie. Hasta 14 kilómetros de playa.
El pantano, que fue construido en 1955, recoge las aguas de los ríos Alberche y Cofio para abastecer de agua y electricidad al suroeste de la Comunidad de Madrid.
En este lugar especial Felipe tenía una casa y se la prestaba para hacer sus fiestas. Estos detalles nunca trascendieron porque los escoltas del entonces príncipe se encargaban de ocultar lo que se podía convertir en un gran escándalo para evitar manchar la imagen de la corona española.