El rey Felipe VI ha experimentado un notable cambio en su vida desde que Letizia Ortiz Rocasolano se convirtió en su esposa hace casi dos décadas. En una relación que ha sido objeto de constante escrutinio mediático, Letizia ha demostrado ser una influencia poderosa en la vida del monarca. Este impacto se ha traducido en la pérdida gradual de sus amigos más cercanos, dejándolo con un único confidente en la actualidad.
Los amigos de la juventud del rey Felipe VI eran una parte fundamental de su vida antes de su matrimonio con Letizia. Compañeros desde la infancia, compartieron risas, secretos y aventuras. Sin embargo, la relación con ellos se ha desvanecido con el tiempo, y la presencia de la reina ha sido señalada como la principal razón detrás de esta disolución de amistades.
Letizia, considerada por muchos como una mujer fría, calculadora y controladora, ha mostrado desde el principio una personalidad que no siempre ha encajado con el círculo de amigos de Felipe. Su llegada a la vida del entonces príncipe de Asturias supuso un cambio drástico en su rutina y sus relaciones personales. Mientras Felipe disfruta de actividades como la vela o el esquí, Letizia prefiere la ópera, el teatro y el cine. Esta divergencia de intereses ha llevado al monarca a pasar tiempo en solitario, buscando refugio en reuniones con amigos de la juventud.
La pérdida de amigos cercanos
La lista de amigos de Felipe VI que solían ser parte de su círculo cercano es larga e incluye nombres como Álvaro Fuster, Javier López-Madrid, Pedro López Quesada y su primo Pablo de Grecia. Sin embargo, con el tiempo, la mayoría de ellos se han alejado, y solo un amigo ha logrado permanecer a su lado: Álvaro Fuster. “La cosa se complicó mucho con la llegada de Letizia, había gente que no le caía bien y al revés. En cualquier caso, desde que Felipe es rey es mucho más serio. Se ha vuelto más reservado, ha ido perdiéndolos uno a uno”, revela una persona muy cercana al hijo de Juan Carlos I.
La sombra de "La Chacha" en el círculo de amistades del rey Felipe
Muchos han apuntado a Letizia como la causa principal de este distanciamiento entre Felipe y sus amigos de toda la vida. Su personalidad controladora y manipuladora ha sido el centro de críticas por parte de los compañeros del rey, quienes consideran que Letizia tiene un carácter dominante. En conversaciones privadas, algunos de estos amigos incluso la apodaron "La Chacha" debido a sus humildes orígenes en Moratalaz, que contrastan con la aristocracia que rodea a la realeza, según revelaciones de Daniel Forcada y Alberto Lardiés, en ‘La Corte de Felipe VI’.
El impacto de Letizia en la vida del rey no se limita a su círculo de amigos, ya que su llegada a Zarzuela también generó tensiones en la Familia Real. Tanto Juan Carlos I como Sofía, padres de Felipe, experimentaron un gran cambio en sus vidas con la entrada de Letizia en la Casa Real.