El matrimonio de Felipe VI y Letizia es una guerra de poderes que ya tiene un ganador desde el inicio. No es un secreto para nadie que la reina consorte ejerce un montón de influencia sobre la casa real, tanto por el peso de sus decisiones, como la influencia sobre las decisiones de Felipe VI, el cual ha llegado a ser duramente criticado por su padre y sus círculos cercanos, dándole incluso el mote de “calzonazos”, consideran que es una humillación que el rey esté dominado por su mujer.
Por otra parte, hay momentos en los que Felipe VI y Letizia tienen diferencias en las que les cuesta ponerse de acuerdo, generalmente tiran hacia el lado de Letizia, pero hay dilemas en los que parece que podría surgir una crisis irrecuperable, como el que Felipe VI quiera que la princesa de Asturias curse estudios militares mientras que Letizia se niega rotundamente, aún es imposible saber cuál de las dos fuerzas gane esta discusión, pero por historial, Letizia lleva la mano ganadora, no sería la primera vez que Felipe VI baila al son de su esposa.
Felipe VI intentaba recuperar su relación con Juan Carlos I, pero Letizia tiene otros planes para él
Desde que el emérito empezó a viajar de nuevo a España, se ha notado progresivamente una intención del rey en recuperar la rota relación que tiene con su padre, incluso participando junto a él en las carreras de Sanxenxo, y defendiendo frente a Pedro Sánchez que su padre no debería tener prohibido el acceso al país pues no ha sido imputado de ninguna forma. Obviamente esto va totalmente en contra de los deseos de Letizia, quien estaría trabajando horas extra para sacar esta idea de la cabeza de Felipe VI.
En el caso de un hipotético divorcio o una separación, lo más probable es que Felipe VI saldría perdiendo, se quedaría sin Letizia y sin sus hijas, por lo que entendiblemente es un escenario en el cual el rey no se quiere ver envuelto, le resultará mucho más tentador simplemente aguantar las órdenes de su esposa y a la vez conservar a Leonor y Sofía a su lado, relativamente, pues la más pequeña está a nada de iniciar sus estudios internacionales así como ya hizo Leonor de Borbón, cuyo futuro ahora es un misterio.
Letizia no quiere que Juan Carlos I ponga un pie de nuevo en España
El que Letizia y Juan Carlos I estén enemistados no es una sorpresa para nadie y mucho menos una novedad, las miradas feas, los malos tratos y los motes nacen desde que se conocieron y nunca ha cambiado, el rey emérito no quería que Letizia se casara con su hijo, y la ahora reina consorte no quiere tener ni remotamente cerca a alguien que le ha atacado tanto con los años como lo ha hecho Juan Carlos I, quiere mantenerlo fuera de España, y solo el paso del tiempo dirá si logra mantener el poder y la influencia del anterior rey fuera del país.