2023 fue un año complicado para la corona, especialmente para los reyes Felipe VI y Letizia quienes se enfrentaron a todo tipo de discusiones generadas por temas tanto internos como externos. Los reyes no lograban ponerse de acuerdo para muchas cosas, por ejemplo, el lugar al que irían a estudiar sus hijas en esta nueva etapa que iniciaron, Leonor asistiendo a la academia militar de Zaragoza, y Sofía en la institución donde ya se graduó su hermana mayor, el UWC Atlantic College de Gales, pero a pesar de todo Letizia podía presumir de algo desde hace años, y es que lograba que su esposo le diera la razón en casi todo.
No solo en sus discusiones, sino de cara a tomar decisiones importantes u otras más relacionadas con la familia. Gracias a esto se ha notado el alejamiento del resto de Borbones de los reyes, e incluso tenemos momentos tensos e incómodos como las vacaciones de Marivent de 2023, donde por orden de Letizia nadie pudo disfrutar de las instalaciones mientras ella, su esposo y sus hijas estuvieran allí, dejando al resto de su familiares en la calle y destrozando cualquier invitación que Sofía de Grecia hubiera hecho al resto de la familia.
Las cosas cambian para Letizia, Felipe VI ya no le sigue el juego
Sin embargo, a finales de 2023 esto empezó a cambiar. Se notaba mayor resistencia de parte de Felipe VI y no ayudaba que su familia ejerciera presión para que recapacitara sobre sus acciones, pero fue finalmente lo de Jaime del Burgo que acabó por destruir irremediablemente la relación de los reyes. Felipe VI no era extraño a esto, ya lo sabía de primera mano y se había dado el tiempo de perdonar (pero no olvidar) lo que su esposa le había hecho, pero definitivamente el que la noticia se hiciera pública cambió algo en su relación. Ahora el rey es mucho más negativo con Letizia y está empezando a aprovechar su autoridad, dejando a Letizia muy mal parada frente a todos.
Se había esparcido la noticia de que desde Zarzuela están intentando concluir qué hacer con la situación actual, pero al menos Felipe VI no parece tener ninguna intención de que Letizia se quede pues se ha dedicado a humillarla enfrente de todas las personas que pueda, o al menos dentro de Zarzuela, donde la trata bastante mal en presencia del personal del palacio, y en intimidad ni se diga, pues desde hace tiempo que no existe, pero cuando están los dos solos el rey trata a Letizia de forma completamente irrespetuosa e inadecuada.
La única excepción es cuando están en presencia de sus hijas, Leonor y Sofía de Borbón, pues ambos ponen por delante a sus hijas por encima de todo, pero hasta en esto Letizia tiene las de perder pues sus hijas vieron con muy malos ojos lo suyo con Jaime del Burgo, especialmente la princesa de Asturias, quien por el bien de la continuidad de la corona seguramente se aleje cada vez más de su madre, mientras Felipe VI deja claro que ahora no olvida, sino que tampoco perdona.