Probablemente sea la peor Nochebuena para la reina Letizia y para el rey Felipe VI, ya que un montón de cosas se les han acumulado y no han hecho más que empeorar la crisis matrimonial entre los reyes. Ya mucho se comentaba sobre esta crisis, pero ahora es mucho más evidente y todo gracias (o por culpa) de Jaime del Burgo. El abogado soltó una bomba que ninguno de los dos reyes esperaba en lo más mínimo, aunque estos eran conscientes de la existencia de Jaime del Burgo y de lo que había hecho Letizia. Sin embargo, no han podido hacer nada para evitar que haya un mal ambiente en Zarzuela, y en contra de todo pronóstico, los reyes celebrarán Nochebuena.
Quizás era lo más previsible, ya que era obvio que en Zarzuela no dejaría de celebrar Nochebuena, ya que eso solo empeoraría la imagen que tiene el público de la familia real. El tema es que hay tan mal ambiente que la celebración no salió como cualquiera esperaría, ya que el disfrute fue casi nulo. Sin ir más lejos, hay que hablar de dos figuras presentes en la cena de Zarzuela por la ocasión: Paloma Rocasolano y la reina Sofía.
Las consuegras no se podían ni ver al estar en la misma mesa
No es secreto que la reina emérita y la madre de Letizia se llevan extremadamente mal. Las dos nunca han gozado de tener una buena relación y se nota, ya que conforme han pasado los años la situación entre las dos se ha vuelto más complicada. Teniendo esto en mente, es difícil esperar que tanto la reina emérita como Paloma Rocasolano estén en la misma mesa y se lleven bien, cosa que no pasó y al parecer nunca pasará.
La reina emérita se negó a pasar sus festividades con su familia en Ginebra, ya que es tradición para ella estar en Zarzuela con su hijo y con sus nietas, algo que al parecer no va a cambiar en absoluto, o al menos no por ahora. Mucho se ha debatido sobre si esta fue la última Nochebuena de Sofía de Grecia en Zarzuela, pero todavía es algo que la emérita no ha confirmado, pero lo cierto es que esta Nochebuena no fue la mejor para ella.
Primero, los reyes tienen sus problemas a raíz de lo sucedido con Jaime del Burgo, pero aparte también estaba Paloma Rocasolano, su consuegra y con la cual debería llevarse bien, pero ha sido todo lo contrario. Las dos no se podían ver en la mesa y se notaba la tensión en cada rincón de la mesa, y no es para menos.
Tanto Paloma Rocasolano como la reina emérita han tenido siempre sus diferencias, aunque lo que Sofía de Grecia no perdona es que Paloma Rocasolano y su hija la hayan apartado de sus nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.