La actitud de Letizia parece que no solo incomoda a la familia de su esposo Felipe VI, sino también a sus amistades. Para evadir este momento incómodo con su entorno más cercano, el monarca ha optado por dejar de llevar a su mujer a las comidas con sus amigos.
Resulta que, así como sus suegros, los reyes eméritos doña Sofía y don Juan Carlos I, y sus hermanas, las infantas Elena y Cristina, los amigos de toda la vida del club náutico de Felipe no tragan a la reina consorte.
Para las amistades del rey, la hija de Paloma Rocasolanono tragan a Letizia porque presuntamente amarga las cenas, la califican de ser estirada, de estar a la defensiva, acomplejada, y además de sentirse mal en el ambiente de dinero.
Letizia terminó su matrimonio por una infidelidad
Parece que la actitud de la consorte no solo ha ocasionado problemas en su actual matrimonio, también lo hizo en su pasada relación con Alonso Guerrero. La que recientemente se ha desvelado que terminó por una presunta infidelidad, según lo recogido por el sitio web de Lecturas.
Presuntamente la mujer vivió los cuernos y en su matrimonio eran tres: "El amor entre Letizia y Alonso se rompió dieciocho meses después del matrimonio. Algunos familiares y allegados del escritor llegaron a comentar que Letizia sufrió mucho, y que adelgazó varios kilos que nunca llegó a recuperar, porque todo fue culpa de terceras personas", precisó la revista.
Lo cierto es que, el medio no aclara quién fue infiel. Los testigos sólo afirman que Letizia sufrió y adelgazó tanto que todavía le dura ahora su extrema delgadez.
Según lo contado, parece que fue la consorte quien sufrió la infidelidad, porque desde el inicio de su segunda relación le dijo a segundo marido, el rey Felipe, que no soportaría una infidelidad, que ella no era como la reina Sofía y que al primer cuerno se volvería a divorciar y se largaría.
Lo cierto es que al transcurrir el tiempo nacieron las niñas y Letizia tuvo que firmar unos capítulos matrimoniales en los cuales, en caso de divorcio Leonor y Sofía, se quedan en Zarzuela con Felipe. Ahora, sin embargo, cambia la cosa. Igual que Letizia ya no podrá ser regente, ya no podrá ser apartada de sus hijas en caso de divorcio. Felipe habrá de vigilar, si comete una infidelidad, porque Letizia no callará y se convertiría en una amenaza para Zarzuela.
Letizia es fría y estirada
Según el entorno más cercano a la consorte, ella se caracteriza por ser fría y estirada. tanto en España como en el extranjero. Esta impresión se basa en su personalidad reservada, su apariencia elegante y su educación formal.
Letizia es una persona reservada y no suele expresar sus emociones en público. Esto puede dar la impresión de que es fría o distante. Además, su apariencia elegante y su educación formal pueden hacer que parezca estirada o poco accesible.
También es importante tener en cuenta que la opinión pública sobre Letizia ha ido cambiando con el tiempo. En los primeros años de su matrimonio con Felipe VI, era una figura muy popular. Sin embargo, su popularidad ha ido disminuyendo en los últimos años, en parte debido a estas impresiones negativas.