Octubre y noviembre han tenido días que deberían ser de celebración para la realeza, pues en octubre Leonor de Borbón cumplía sus 18 años y juramentó ante el congreso en una ceremonia que llevaba todo el año siendo esperada por la realeza y por los medios por igual, pero lo que no hizo tanto ruido hasta hace poco es que dos días después del cumpleaños de Leonor, Sofía de Grecia celebraría su cumpleaños número 85, una situación con la cual podríamos hacer un curioso paralelismo que demuestra la época de cambios en la casa real, una época donde la generación más antigua pasará a un tercer plano mientras que Leonor de Borbón y su generación tendrá un rol cada vez más visible a nivel público.
Sin embargo, ninguno de los dos eventos ocurrió como se esperaba, ya que tanto en la juramentación de Leonor de Borbón como en el cumpleaños de la emérita hubo ausencias que se notaron, algunas presuntamente por compromisos laborales previos, como sería el caso de Juan Urdangarin, pero otras figuras faltaron por producto de su mala relación con los reyes, o bien queriendo evitar más roces de los que ya hay, como Pablo Urdangarinque estaba en Alemania con su pareja el día de la jura de Leonor.
Felipe VI es rígido con su familia, especialmente con su hermana Elena
Con motivo del cumpleaños de la Reina Sofía, la emérita invitó a toda la familia cuando tuvo la mejor oportunidad durante el cumpleaños de Leonor de Borbón. Sin embargo, su hijo al analizar la situación se habría adelantado a decir que “Zarzuela no es un hotel”, evitando que su madre se permita la libertad de invitar a algún familiar a quedarse, especialmente hablando de la infanta Elena y sus hijos.
Una de las ausencias de la celebración fue Victoria Federica, hija mayor de la infanta Elena y con quien Sofía de Grecia “estaría muy molesta” por haber faltado a su cumpleaños, una ausencia que habría ocurrido por las declaraciones de Felipe VI respecto a que el palacio real no era un hotel.
En ocasiones anteriores, la hija de la infanta Elena se ha podido permitir el lujo de quedarse en Zarzuela, incluso hay momentos puntuales en los que ha llevado amigas para que pasen la noche con ella, pero poco hay que echarle cabeza para llegar a la conclusión de que esto es algo que no debe agradar demasiado a los reyes, especialmente a Letizia, quien durante años se ha esforzado en mantener a raya a la familia de su esposo, y ahora que la única que queda es la reina Sofía, esta podría haber intentado que por lo menos alguno de sus familiares se hospedara una noche en Zarzuela. Debe ser prioridad para la reina consorte evitarlo a toda costa.
Vale la pena destacar que el ala donde se ha quedado Victoria Federica está relativamente retirada de donde hacen vida los reyes, pues se trata del edificio donde vive la reina emérita junto a la tía “Pecu”, pero ni esto es suficiente para justificar que alguien más de la familia se hospede allí.