Son variadas las historias que se pueden hallar en las monarquías de Europa. Hay anécdotas cada una más descabelladas que la otra y otras que parecen sacadas de un drama de la televisión. Los ejemplos sobran y solo con los reyes de España y los Borbón tenemos para dar y regalar.
Se podría hacer compilado de historias sobre los actuales reyes y una enciclopedia que vagamente alcance para narrar las historias que envolvieron a los eméritos. Tampoco se salvan las hermanas del rey o sus hijos, pero en este caso no es ninguno de los Borbón quien tiene que enfrentarse una vez más a una historia de su pasado, sino que le corresponde a alguien de Mónaco.
El principado ha vivido sus dramas con el paso de los años, como los constantes problemas del matrimonio entre el príncipe Alberto II y Charlene de Mónaco. Sin embargo, ahora le toca a Estefanía, la hermana de Carolina de Mónaco, ver una vez más una de sus historias del pasado, una que se recuerda bien pero seguramente ella preferiría olvidar.
Estefanía de Mónaco fue víctima de muchas traiciones, la primera fue muy importante
Como puede ocurrir en muchas relaciones, la infidelidad y los secretos de pareja están a la orden del día, y si alguien ha tenido muy mala suerte en este campo es Estefanía de Mónaco, quien ha tenido que enfrentarse en su vida a una traición tras otra de muchas de sus parejas sentimentales, y vaya que empezó con mal pie.
Esta historia tiene que ver con su primera pareja conocida. Cuando tan solo tenía 17 años Estefanía de Mónaco empezó a salir con Urbano Riario Sforza Barberini Colonna, un príncipe italiano que cautivó perdidamente a la princesa, motivo por el que iniciaron una relación a pesar de que este le sacaba 4 años de edad de diferencia.
En principio el italiano no se dio a conocer en la familia de Mónaco por su relación con la princesa, sino que era un amigo del príncipe Alberto II que luego Estefanía de Mónaco terminó conociendo, y es ahí donde las cosas fueron a mal, principalmente para ella.
El amor no ha sido el punto fuerte de Estefanía de Mónaco
Estefanía de Mónaco estaba enamoradísima de su primera pareja, pero era un secreto entre ellos. La hermana de Carolina de Mónaco tenía que escaparse para verse con el príncipe italiano en lugares como la discoteca Jimmy’z, y es aquí donde también se comprometía la imagen de la corona pues empezó a escaparse del colegio. Además, en su momento, Grace Kelly intentaba vender la moto de que Estefanía de Mónaco prefería beber Coca-Cola a alcohol cuando estaba en discotecas, cosa que luego se supo era más que falso.
Sin embargo, lo que verdaderamente golpeó a la princesa y además a toda su familia fue cuando el príncipe Urbano Riario empezó a hablar en los medios de su relación, de la cual hablaba sin cortarse y explicaba todo. Incluso los momentos íntimos los describía con gran detalle, algo que marcó a Estefanía de Mónaco de por vida, pero que tampoco la prepararía para todo lo se le venía encima en los años venideros.