Por lo general, las vacaciones suelen ser un periodo que busca alterar totalmente la cotidianidad, salir de la sofocante rutina laboral y pasar algunos días sin tantas preocupaciones, o al menos, es lo que se le vendría a la mente a más de uno al pensar en vacaciones. Esto no parece ser la norma en la realeza, pues mientras unos sí aprovechan sus días libres para veranear, otros simplemente no parecen tener la intención de cambiar su rutina.
Zarzuela y Marivent, no hay diferencia en las rutinas ni en vacaciones
A día de hoy es de conocimiento general la situación de la corona. Zarzuela se ha quedado desolada con los años y la responsable es bien conocida por todos: la reina Letizia, quien siempre invirtió todos sus esfuerzos en fracturar a la familia real, cosa que le funcionó, pues ahora solo ella, Felipe VI y sus hijas, Leonor y Sofía de Borbón viven en Zarzuela. En un palacio distinto les acompaña la reina emérita Sofía de Grecia, quien vive con su hermana Irene de Grecia. El resto brilla por su ausencia. Ni las infantas Elena ni Cristina, ni sus hijos, mucho menos Juan Carlos I, todos han sido alejados de Felipe VI y a su vez entre ellos, dejando como resultado una familia de integrantes bastante alejados unos de otros.
Con las vacaciones en Marivent, sería lo más natural pensar que, para variar, la familia real cambiaría sus hábitos. Los planes de la emérita dieron a entender esto. Lo gritó a los cuatro vientos y todo el personal se enteró. Toda la familia se iba junta a Marivent, por esto mismo el trabajo de limpieza fue extremo, no quedó telaraña sin quitar ni pared sin pintar. El resto no transcurrió como se esperaba. Letizia dejó claro que si las infantas Elena o Cristina (hijos incluídos) se pasaban por Marivent ella se negaba a permanecer allí, y así fue, pues solo están en Marivent Felipe VI, Letizia, sus hijas, la madre del rey y su hermana. Es la situación de Zarzuela pero con un cambio de paredes solamente.
Felipe VI sería el único que va a ver a su madre
Las apariencias justo ahora no engañan, no importa cuánto se esfuercen en ocultarlo, la familia real está destrozada. No hay feeling entre Letizia y nadie más, de puertas para afuera puede verse a las dos reinas interactuando ocasionalmente pero no es la realidad. En Marivent ni siquiera cenan todos juntos, pues los reyes y sus hijas lo hacen por un lado, y la emérita con su hermana por el otro. Sin embargo, el nexo que queda entre ambos grupos es Felipe VI, quien a pesar de las presiones de Letizia intenta mantener la relación con su madre y su padre hasta donde le sea posible. Es el único que estando en Marivent va a visitar a Sofía de Grecia, no está muy alejado de lo que haría en Zarzuela, pero el gesto es lo que importa.