Froilán es quizás uno de los miembros más controversiales de la familia real de estos últimos tiempos, su fama de juerguista ha jugado mucho en su contra, tanto que ahora reside en Abu Dabi junto con su abuelo y muchos opinan que está igual de exiliado que el emérito. De cierta forma, podríamos considerar su nueva residencia como un exilio, pues el rey y la reina no lo querían en España por la mala imagen que le estaba ocasionando a la familia real.
Froilán era mucho de fiestas y su vida de excesos es lo que le ha posicionado ahora en Abu Dabi, en dónde está bajo el cuidado de su abuelo, o más bien, bajo la vigilancia del emérito. El hijo de Jaime de Marichalar lleva una vida “tranquila”, ya no va a fiestas ni tampoco tiene amigos. Se ha dedicado solamente a trabajar, aunque se nota que no está para nada cómodo, su vida de fiestas ha quedado atrás y no está a gusto con esto.
Sin embargo, en medio de toda esta penumbra, Froilán consigue un nuevo amigo en Abu Dabi, el cual es muy cercano a él debido a la naturaleza de la relación. Al parecer no hay peligro de que Froilán se descarrile, pues hasta el mismo emérito aprueba la relación de amistad con su nuevo amigo.
Froilán y el nuevo amigo que tiene en Abu Dabi
A pesar de que Froilán se ha dejado ver por Abu Dabi bastante solo y sin amigos, tiene un confidente que ha servido de apoyo para él ante toda esta situación: uno de sus escoltas. A pesar de que tiene dos escoltas, el hijo de la infanta Elena se ha llevado muy bien con uno en particular, una buena persona con la que ha demostrado cercanía al no poder congeniar con los jóvenes del país árabe.
Aunque su estancia en Abu Dabi ha sido tranquila y no le ha faltado nada, a este se le ha podido ver con problemas para adaptarse. Está vigilado y tiene problemas para hacer amigos en la ciudad en la que reside su abuelo, por lo que estar solo ha sido normal para él. De seguro este cambio radical le ha afectado, tanto que lo hemos podido ver en un partido de pádel totalmente solo. El aburrimiento le persigue.
Sin embargo, ha conseguido una nueva amistad en el país árabe: uno de sus escoltas y con el cual se lleva muy bien. Se podría pensar que el joven Froilán volverá a sus épocas de fiestas, pero en Abu Dabi está muy bien vigilado, pues a Juan Carlos I no le conviene que su nieto sea polémico también bajo su tutela, ya que este está muy tranquilo. Por lo pronto, al menos sabemos que el hijo de Jaime de Marichalar ha podido superar un poco su soledad y que cada vez más se integra más en Abu Dabi.