El mundo de la realeza ha sido durante mucho tiempo el centro de la atención pública y, junto con él, la vida de sus integrantes ha sido objeto de escrutinio constante. En este contexto, figuras como Kate Middleton, esposa del príncipe Guillermo, y Máxima Zorreguieta, reina consorte de los Países Bajos, han sido sometidas a juicios que van más allá de su papel real. La comparación entre ambas mujeres, destacadas por su posición en la realeza, ha suscitado controversias sobre su origen y matrimonios. Se han levantado acusaciones de ser cazafortunas, enmarcando sus uniones con los príncipes como estrategias para ascender socialmente.
¿Cazafortunas o estrategas sociales?
Kate Middleton no proviene de una familia noble o de la alta sociedad británica, pero siempre tuvo una mirada ambiciosa hacia un futuro de mayor estatus. Cuentan que su madre, Carole Middleton, quien antes trabajaba como azafata, anhelaba que su hija se casara con un hombre de gran riqueza y poder, ya fuera un magnate, un aristócrata o incluso un heredero al trono de Inglaterra. De hecho, se rumorea que Carole fue la mente maestra detrás del encuentro entre Kate y el príncipe Guillermo para hacer realidad ese deseo.
Por otra parte, Máxima de Zorreguieta es la reina consorte de los Países Bajos y está casada con el rey Guillermo Alejandro. Nacida en Argentina en una familia de alta posición, su padre, Jorge Zorreguieta, fue ministro de Agricultura durante la dictadura militar argentina. Se comenta que Máxima siempre mostró interés por la riqueza y el poder, buscando activamente un esposo de ese calibre. De hecho, desde pequeña, la madre de la princesa Amalia de Holanda aseguraba a sus amigos que su hija se casaría con "un noble", y así sucedió. Por esta razón, tanto Kate como Máxima han enfrentado críticas por ser consideradas materialistas y por su presunta búsqueda de riqueza a través de sus matrimonios.
Carole y María Cristina: madres influyentes
Se cree que las madres de Kate Middleton y Máxima de Holanda han desempeñado un rol fundamental en sus vidas. Ambas han debido trabajar arduamente para sostener a sus familias, y se dice que esto les motiva a desear un futuro mejor para sus hijas, buscando que alcancen metas que ellas mismas no pudieron alcanzar.
Carole Middleton, madre de Kate, es una empresaria exitosa que estableció un lucrativo negocio de decoración de fiestas infantiles, llamada ‘Party Pieces’, lo que le permitió brindarles a sus hijas una educación de élite y una vida cómoda. Por este motivo, se especula que Carole pudo haber influenciado a su hija para que desistiera de su plaza en la Universidad de Edimburgo, que era su primera elección, y tomara un año sabático. Después de este receso, Kate se inscribió en St Andrews, donde se sabía que el príncipe Guillermo también estudiaría.
En el caso de la madre de Máxima de Zorreguieta, María Cristina Cerruti Carricart, al igual que Carole Middleton, trabajó duro para asegurar una buena educación y un estilo de vida confortable para su hija. Se presume que fue ella quien respaldó a Máxima para viajar a Nueva York y relacionarse con la élite de la ciudad. En este contexto, se reencontró con su amiga Cynthia Kaufman, quien eventualmente la presentó al príncipe Guillermo Alejandro de los Países Bajos durante la Feria de Abril de Sevilla.