Las cosas para Froilán van de mal en peor, o al menos es lo que se puede decir ahora que no tiene la libertad que tenía antes. El joven hijo de Jaime de Marichalar le ha tenido que decir adiós a las fiestas y también a una vida llena de excesos. Pasaba noches y noches en clubs nocturnos de Madrid y su conexión con un grupo VIP que le aseguraba las mejores fiestas y eventos por una módica suscripción.
En Abu Dabi las cosas no han sido iguales. Este está bajo el cargo de su abuelo, Juan Carlos I, y ahora tiene un empleo en una petrolera bastante importante de la ciudad árabe. Sus días se han tornado monótonos y a esto se le suma el hecho de que no tiene amigos. Es decir, tiene conocidos y obviamente habla con gente, pero la mayoría del tiempo se le ha visto solo debido a que este no tiene a sus amistades en el país árabe.
Por si fuera poco, este también tiene que lidiar con el hecho de tener “una niñera”, quién se encarga de vigilarlo, especialmente por las noches para que este no se escape y comience a probar la vida nocturna de Abu Dabi. Juan Carlos I está de acuerdo con esta medida, ya que no quiere inconvenientes con su nieto y mucho menos polémicas a su alrededor.
¿Quién es el que se encarga de mantener a Froilán bajo el radar?
La reina Letizia y Felipe VI estaban de acuerdo en ordenarle a la infanta Elena para mandar a Froilán a Abu Dabi, ahora la misión principal es hacer que Froilán no repita la misma historia en los Emiratos Árabes. Esta misión es más que nada de Juan Carlos I, quién está a cargo de su nieto en dicho país en el que se encuentran. Sin embargo, Juan Carlos I le ha pedido el favor a alguien más para mantener los pasos de su nieto vigilado.
Un amigo militar de Juan Carlos I es el que vigila a Froilán por las noches para evitar que este se escape y quiera revivir sus antiguos días de gloria en Madrid. Esto le ha impedido, de cierta forma, a Froilán crear amistades, por lo que la mayor parte del tiempo se le suele ver solo, además, no es como si en el trabajo le fuera de maravilla.
Jaime de Marichalar está preocupado por esto y le ha demostrado su descontento a los reyes y también a la infanta Elena, con quién tuvo una discusión. Froilán ha llamado incluso a su padre con lágrimas en sus ojos y por eso la actitud de Jaime de Marichalar. Sin embargo, el joven sigue trabajando en Abu Dabi, viviendo bajo el cargo de su abuelo y también estando bajo la mira de “su niñera”, quién no le descuida durante las noches. Esto es principalmente un movimiento de Juan Carlos I para evitar problemas, ya que este está bastante relajado y libre de polémicas en Abu Dabi.