Mientras se resalta frente al ojo público que Irene Urdangarin está a punto de emprender un viaje voluntario para promover la ayuda al prójimo en Camboya, las cosas en su vida privada no han ido tan bien como cabría esperar, y es que la situación con su familia nunca ha sido fácil. Desde que se anunció el divorcio de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina la hija menor de estos dos ha tenido bastantes problemas para manejar su vida y todo a su alrededor, y ahora que las cosas han mejorado un poco tampoco se le ha visto demasiado encaminada en hacer su vida, ganándose una discusión con varios miembros de su familia, incluido el rey, quien la corrió de Zarzuela.
Tanto Irene Urdangarin como Victoria Federica han tenido un lugar “clandestino”, en Zarzuela, y es que a pesar de esas palabras de Felipe VI(“Zarzuela no es un hotel”), Sofía de Grecia se toma el derecho de acoger a sus nietas pues las quiere mucho y no le importa transgredir un poco la autoridad de su hijo o de Letizia, pero con el tiempo la situación se hizo insostenible e Irene de Grecia no tuvo de otra que irse con su madre a Ginebra.
Irene Urdangarin falla en sus estudios, no asistía a la autoescuela
Cuando Irene Urdangarin se matriculó en la autoescuela para sacar el carnet de conducir en España, ya venía de intentarlo un par de veces en Ginebra, sin éxito, pero ahora en suelo español la cosa no fue muy diferente. A pesar de haber tenido la facilidad de hospedarse durante unos meses en Zarzuela, la hija menor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin no mostraba resultados y al final ocurrió lo mismo que en Ginebra, no logró sacarse el carnet.
Situaciones como esta son las que desencadenan varias discusiones dentro de Zarzuela, donde la hija de Iñaki Urdangarin tenía que verse de tú a tú con el rey Felipe VI con relación al comportamiento de la primera. Podríamos agregar al caso de la autoescuela sus estudios de hostelería, de los cuales decidió tomarse un año sabático que no ha sido visto de la mejor manera por los reyes.
La hija menor de la infanta Cristina de patas en la calle por el rey
Sabiendo la cantidad de problemas de imagen por los que está pasando actualmente la corona, es de esperarse que Felipe VI esté en un modo de poca tolerancia hacia sus sobrinas y cualquiera de sus familiares que pueda ser capaz de empeorar la situación que ya viven, por lo que el final de Irene Urdangarin en Zarzuela fue el esperado. Tuvo que irse con su madre por fuerzas mayores y antes de todos los sucesos de la navidad, pero ahora en 2024 se desconoce cuál será el futuro de la hija de la infanta Cristina y si cambiará algo respecto a sus estudios, o si seguirá recibiendo los llamados de atención del rey.