Cuando se trata de la realeza de Reino Unido, no podemos pasar por alto la curiosa relación que existe entre el rey Carlos III y sus hijos, el autoexiliado príncipe Harry y el heredero al trono, el príncipe Guillermo. No podemos decir que tengan la mejor relación pues cualquiera de los otros dos se lleva entre regular y mal con el príncipe Harry, aunque los hermanos siempre han tenido problemas e incluso en una ocasión llegaron a los puños, mientras que Carlos III está disgustado con su hijo menor desde hace mucho por su actual pareja, Meghan Markle.
Estas diferencias son notorias no solo por el trato que manejan entre ellos, sino también en la forma que el rey se desenvuelve respecto a sus nietos, demostrando una considerable variación en su acercamiento a cada uno, claramente influenciado por su relación directa con cada uno de sus hijos.
Carlos III prefiere a su nieto George, inmenso gesto
El príncipe George es, de momento, el segundo en la línea de sucesión después de su padre, el príncipe Guillermo. Se trata de un joven importante para la corona como poco, sin irnos más lejos ocupará el lugar de su padre en cualquier momento, y su hijo, el joven George, hará lo mismo dentro de algunas décadas, por lo que son figuras importantes para Reino Unido y no extrañaría a nadie que Carlos III quiera colmar a su nieto de regalos, o en este caso, ha llamado un bosque entero a su nombre.
No solo es el caso de George, los tres hijos del príncipe Guillermo y Kate Middleton han sido laureados por su abuelo, quien les ha obsequiado todo tipo de detalles para ganarse su favor, pero en este caso el premio gordo se lo lleva el hijo mayor sin duda alguna. Ocurrió cuando el príncipe George apenas tenía 8 años, aunque Carlos III tampoco había ascendido al trono pero evidentemente su poder resultaba incuestionable.
A modo de homenaje, el hijo de Isabel II renombró su jardín más valioso en Bikrhall Gardens a “El Jardín el Príncipe George”. Sus intenciones eran más que claras y aunque los tres hijos de los duques de Gales han recibido algo de su abuelo, el caso de los hijos de los duques de Sussex es la otra cara de la moneda.
Archie y Lilibet, de nietos a amenaza
En principio Carlos III ha ofrecido una cantidad inmensa de cosas a sus nietos, cuando se hablaba de negociaciones entre el rey y el príncipe Harry una de las mayores ofertas del rey era que tanto Archie como Lilibet recibirían la mejor educación que el dinero puede pagar si es que su hijo abandonaba a su esposa y regresaba a Reino Unido con sus hijos, sin embargo la amabilidad le duró poco.
El príncipe Harry no parece tener intenciones de regresar, ni solo ni acompañado, a pesar de sus esfuerzos Carlos III se habría cansado de ofrecer cosas y empezaría a quitarlas a conciencia, amenazando con anular todo trato real a Archie y Lilibet, dejando claro que sus nietos no son más que un medio para influenciar a su hijo.