Generalmente las noticias involucran a integrantes de una casa real u otra, sea Mónaco, España o Reino Unido, pero en esta ocasión el revuelo viene generado de las interacciones de dos de estas realezas, las cuales realmente no son precisamente cordiales, todo lo contrario, hay tensión y cada quien tira para su lado. Los motivos son diversos, pero vamos por partes.
Los reyes eméritos, desterrados de la coronación de Carlos III
La coronación de Carlos III ya pasó, el padre de los príncipes Harry y Guillermo es oficialmente rey junto a la reina consorte Camilla Parker-Bowles. Fue un evento que dio mucho que pensar por diferentes motivos, como la posición un tanto humillante del duque de Sussex, o la aún más humillante ausencia de Juan Carlos I y Sofía de Grecia, los eméritos de España que, se esperaba, asistieran a la coronación, finalmente no se presentaron, aunque parece que las ganas les sobraban, los motivos fueron otros.
El emérito y Carlos III se llevan relativamente bien, pero no se puede decir lo mismo de otras duplas entre las realezas, por ejemplo, el actual rey de Reino Unido no tiene demasiada relación con Felipe VI, al igual que con Letizia, de hecho, le parece incomprensible el cómo alguien como ella ha podido llegar a tener tanto poder como el que ahora disfruta, gobernando con el rey de España en la palma de su mano y a Zarzuela en la otra, todo bailando al son de “La Chacha”, como la llama Juan Carlos I entre sus círculos de amigos.
Una de las cosas que menos le entra a la cabeza a Carlos III, sería sin lugar a dudas cómo logró exiliar de España a alguien con tanto dinero y poder como lo es Juan Carlos I. Una de las razones por las que el rey de Reino Unido no tiene tanto “feeling” con Felipe VI sería por permitir esta situación, en teoría se habría negado al exilio de su padre, pero igualmente Letizia tuvo la mano más pesada en esta decisión, como en casi todo lo que se decide en la casa real.
La reina consorte hace y deshace a gusto dentro y fuera de España
Sin embargo, es gracias a Letizia que los eméritos no habrían podido asistir a la coronación de Carlos III, una llamada telefónica a Camilla Parker-Bowles habría sido el desencadenante de la cancelación de la asistencia de los padres del actual rey de España. Las constantes presiones de la esposa de Felipe VI, quizá sobre los negocios turbios del emérito, o simplemente porque quería que ella y Felipe VI fueran los únicos representantes de España en la coronación, pues de haber asistido los 4 se habría repetido una situación de lo más peculiar estos días, las dos parejas, de reyes y eméritos muy rara vez se cruzan, la última vez que ocurrió fue durante el funeral de Constantino de Grecia, pero fuera de esto, está claro que la relación entre los eméritos y los reyes, o mejor dicho, entre Juan Carlos I, Sofía y Letizia, no es la mejor.