Los que han seguido de cerca durante las últimas décadas todos los relacionado con la monarquía británica sabes muy bien que Camilla Parker Bowles no ha sido un personaje precisamente secundario en Buckingham Palace.
Es más, desde hace poco más de un año la que durante muchos años fue la pareja del hoy rey Carlos III y que ella también su mujer desde hace unos años, Camila se ha convertido en la reina de Inglaterra, un cargo que, como apuntan desde varios medios británicos en base a algunos de los secretos filtrados por sus más cercanos, nunca quiso tener.
Camilla echa de menos su vida más relajada
En este sentido, si bien es cierto que la mujer de Carlos III tenía muy claro que acabaría llegando su día por muy tarde que fuera, no son pocos los que argumentan que Camila estaba más que satisfecha con su vida como duquesa, una vida mucho más tranquila y relajada que la que tiene hoy en día como reina.
Es más, parece ser que no han sido pocas las veces que Parker Bowles ha elevado sus quejas en Buckingham Palace sobre su apretada agenda y sobre no poder disponer de la libertad de la que disponía antes de convertirse en reina, sobre todo al ver que todos y cada uno de sus días están más que programados desde hace meses y en los que apenas tiene tiempo para descansar y pasar tiempo con su familia, algo que ha hecho durante toda su vida.
Teniendo en cuenta además que Camila tiene más de 70 años, el aspecto físico es también un tema tener en cuenta, sobre todo a nivel de cansancio por mucho que su agenda no contempla precisamente actos en los que deba desgastarse mucho en este sentido. Eso sí, cansa mucho más estar ejerciendo de reina que estar ejerciendo de duquesa tranquilamente en una de sus propiedades que tiene a lo largo y ancho del que es ahora su reino.