El actual monarca de Reino Unido, Carlos III, siempre ha sido una figura controversial de la realeza, desde hace décadas ha dado de qué hablar, y ahora que está en el ojo del huracán desde su subida al trono el año pasado, siguen saliendo detalles pequeños y grandes de polémicas de su pasado, revisemos el expediente del monarca que viaja con su retrete a donde lo necesite.
Las Infidelidades del Rey Carlos III
El Rey lleva desde 2005 en unión con Camilla Parker-Bowles, junto a quien se planea reciba la corona oficialmente el 6 de mayo del año en curso, sin embargo, era su anterior esposa, la difunta y respetada Lady Di, quien tenía mucha aceptación por parte de la población, siendo a día de hoy una figura mítica de la realeza, recordada con enorme cariño, pero que paradójicamente sufrió de un matrimonio lleno de infidelidades con Carlos III, siendo su actual esposa, Camilla Parker-Bowles, una de sus amantes en aquel momento, pero las traiciones del rey estaban lejos de terminar allí.
Fue la mismísima Lady Di quien en 1995 confesó que “era un matrimonio de tres” en una entrevista para la BBC, la “princesa del pueblo” confesó además haber fallado igualmente pero su versión de la historia y su honestidad le hizo ganarse la simpatía del público, manchando la imagen de Carlos III, no solo por infiel, sino porque Diana cuestionaba la capacidad de su ex-esposo para ser rey, aunque la pareja anunció su separación en el año 1992, no fue hasta 4 años luego, en 1996, que se daría por completado el divorcio.
Se ha hablado mucho también de la supuesta infidelidad del rey con la niñera de sus hijos en aquel entonces, los príncipes William y Harry, la cual se decía incluso había quedado embarazada del rey y fue obligada a abortar, la niñera tuvo que ser indemnizada por la mala imagen que se le dio y las críticas que le llovían de todas partes a causa de su presunto embarazo, el cual resultó ser falso.
Las Cartas de la “Araña Negra”
Según una entrevista que concedió el 2018, Carlos III nunca se ha inmiscuido en asuntos políticos de forma directa, pero durante años se ha comentado sobre cómo en algunas ocasiones aparentemente había presionado a diferentes políticos por temas como la salud y el medio ambiente, esta información se conoce por unas cartas dirigidas a diferentes ministros conocidas como “los memorandos de la araña negra”, donde además, se notaba un existente desagrado de parte de Carlos III hacia la arquitectura moderna.
Cuando se formalizaron los planes de modernización de la National Gallery de Londres, por allá en el año 1984, el actual portador de la corona expresó que llevar dicho proyecto a cabo sería como “añadir un monstruoso forúnculo en la cara de un amigo muy elegante y querido”, por lo que esta conducta no es para nada reciente.