La princesa Amalia de Holanda ha desatado la envidia en la princesa Leonor al escaparse a unas vacaciones de ensueño en la codiciada isla griega de Mykonos. Mientras la joven heredera holandesa disfruta de un paraíso de lujo y desenfreno, la princesa de Asturias se queda en casa, frustrada por no poder vivir la experiencia de esta hermosa isla del mediterráneo en compañía de sus amigos del UWC Atlantic College de Gales. Y es que su madre, la reina Letizia, ha sido firme en su decisión de mantener a Leonor cerca y no permitir que viaje sola a Grecia, tierra natal de su abuela, la reina emérita Sofía. Debido a la prohibición de Letizia, Leonor tendrá que conformarse con unas vacaciones más "familiares" en Mallorca, bajo la vigilancia de sus padres y en compañía de su hermana pequeña, la infanta Sofía. Mientras tanto, Amalia gozará de total libertad en las exclusivas playas de Grecia.
La exclusividad de Grecia: el anhelado destino de los de Orange-Nassau
La princesa Amalia, siguiendo los pasos de sus padres, los reyes Guillermo y Máxima de Holanda, ha encontrado en las islas griegas su refugio de verano. La familia real holandesa ha hecho de Spetses su lugar secreto desde hace más de una década, disfrutando de la privacidad y el esplendor que esta joya mediterránea ofrece. Ahora, Amalia ha extendido su experiencia a Mykonos, Santorini y Milos, convirtiendo a estas islas en su destino preferido durante la temporada estival.
La propiedad real en Spetses, valorada en más de 4,5 millones de euros, es un auténtico paraíso. Con 4.000 metros cuadrados de terreno, la majestuosa mansión frente al mar Egeo ofrece vistas impresionantes que dejan a todos sin aliento. La vivienda, con tres casas independientes, no escatima en lujos, ofreciendo jacuzzi en el dormitorio principal, piscina privada, pista de tenis y hasta un muelle exclusivo.
Sin embargo, detrás del brillo y la opulencia, las sombras de la controversia acechan. Protestas y denuncias han salpicado el idílico panorama, con activistas y locales alzando la voz por el cierre de una parte pública de la playa para proteger a los reyes de los Países Bajos y a sus hijas. ¿Es la privacidad un precio demasiado alto en este rincón del paraíso griego?
Realidades contrastantes entres las futuras reinas de España y los Países Bajos
A pesar de las controversias, la princesa Amalia ha decidido seguir disfrutando de sus privilegios como miembro de la realeza neerlandesa durante sus vacaciones en las islas griegas, atrayendo la atención de los medios y convirtiéndose en la sensación de la alta sociedad europea. Por otro lado, Leonor se enfrenta a un camino más restringido, con las limitaciones que impone su posición como heredera al trono español. Sin embargo, mientras Letizia la protege con su mano de hierro, Leonor sueña con poder disfrutar de unas vacaciones de verano que la libere de los protocolos y le permita explorar su verdadero yo. El destino de estas jóvenes princesas ha dejado al descubierto las diferencias en sus libertades y privilegios, desatando debates sobre los roles y responsabilidades de las futuras reinas de España y los Países Bajos.