El proceso de divorcio entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina aún no ha llegado a una resolución. Aunque se había anunciado que firmarían el divorcio en noviembre, la situación sigue estancada debido a que Cristina detuvo una vez más los trámites. Esta demora ha causado frustración en el ex duque de Palma, quien anhela cerrar este capítulo para avanzar con su vida junto a su nueva pareja, Ainhoa Armentia.
Sin embargo, la hija de Juan Carlos I no está dispuesta a facilitarle a su exmarido la posibilidad de ser feliz con su pareja actual. Es por ello que, desde hace varios meses, ha modificado los términos del divorcio (que originalmente debía ser firmado en junio, coincidiendo con el 18 cumpleaños de su hija Irene) con el objetivo de obstaculizar aún más la relación de su ex esposo con Ainhoa Armentia. En esta nueva revisión, la infanta Cristina ha incorporado una cláusula que estipula la pérdida de todos los beneficios acordados en caso de que Urdangarin se case con Armentia. Además, se requeriría la devolución de los dos millones de euros de indemnización que el ex duque de Palma recibió por renunciar a publicar un revelador libro de memorias que había escrito durante su tiempo en prisión.
Ainhoa Armentia: entre restricciones y discreta complicidad
Asimismo, en los términos del acuerdo de divorcio se establece que Ainhoa Armentia no tiene permitido acercarse a los hijos de la pareja ni mantener contacto con ellos, lo que dificulta la vida normal de la pareja. Hasta ahora, se ha visto al ex duque de Palma visitar a sus hijos, generalmente acompañado solo por su madre, Claire Liebaert. Sin embargo, lo que Cristina desconoce es que la abogada siempre está cerca de Iñaki, incluso cuando él viaja a Barcelona o Ginebra para encontrarse con sus hijos. Según fuentes cercanas al ex jugador de balonmano, Ainhoa Armentia siempre lo acompaña, aunque se mantiene discretamente en un segundo plano, esperándolo en el hotel. Esta doble vida les permite evadir la restricción impuesta por Cristina y violar una de las cláusulas del acuerdo de divorcio.
Pablo Urdangarin desafía las restricciones impuestas por su madre
De hecho, se rumorea que hace tan solo unos días, cuando Pablo Urdangarin jugó con su equipo, Fraikin BM. Granollers, contra Bathco BM. Torrelavega, Iñaki Urdangarin no solo viajó en compañía de su madre y de dos de sus hermanos, quienes estaban animando a Pablo desde las gradas, sino que también estuvo acompañado por Ainhoa Armentia. Aunque ella se mantuvo en el hotel, tras bastidores, han desarrollado una relación de complicidad con Pablo y su novia, Johanna Zott. Incluso fueron vistos disfrutando de una cena en pareja, dando la impresión de llevarse excepcionalmente bien. Esto evidencia una conexión que se mantiene oculta de la mirada de la infanta Cristina y de sus otros tres hijos, Juan Valentín, Miguel e Irene, quienes han optado por no establecer ningún tipo de contacto con la nueva pareja de su padre.