Como bien saben los que siempre han seguido atentamente las noticias de la casa real española, la infanta Elena ha sido siempre la hija de los Reyes Eméritos Juan Carlos I y Sofía que más discreta se ha mostrado en todos los sentidos.
Si bien es cierto que evidentemente estuvo en el punto de mira hace un tiempo, especialmente durante su proceso de separación con Jaime de Marichalar, y que sus hijos Froilán y Victoria Federica sí que han protagonizado unas polémicas que han puesto a la casa real en el punto de mira, la hermana mayor del rey Felipe VI siempre se ha mantenido al margen de polémicas que hayan puesto a la institución en una posición complicada.
Eso no significa que, como bien saben los que suelen estar atentos a las noticias de la monarquía española, que la infanta Elena no tenga sus secretos de puertas hacia dentro, es decir, no tenga una serie de vicios ocultos que han salido a la luz años más tarde.
Los productos de la teletienda, uno de los vicios de la infanta Elena
En este caso no fue otra que la periodista Carmen Duerto la que, en la biografía que escribió acerca de la hija mayor de Juan Carlos I y Sofía, apuntara que durante muchos años la infanta Elena se convirtió en una adicta a comprar productos de la teletienda, en concreto todos aquellos productos relacionados con procesos de adelgazamiento.
En otros medios como Celeb apuntan que, consciente de que lo mejor para seguir manteniendo esta especie de vicio lejos de la opinión pública e incluso lejos de su familia, la infanta Elena decidió que lo mejor era contar con la ayuda de dos de sus mejores amigos, en este caso los hermanos Ricky y Álvaro Fuster, que le dijeron a la infanta que no tenía ningún tipo de problema para que fuera esta quiere enviar todos los paquetes a casa de su madre y no a la Zarzuela, para no levantar precisamente muchas sospechas.
Parece ser, eso sí, que este vicio al cual estuvo enganchado durante varias décadas ha pasado ya la mejor vida, aunque no sería de extrañar que hoy en día, con el boom del comercio por Internet, la infanta Elena tuviera en Amazon uno de sus mejores amigos.